El 29 de enero de 1848, hablando en la Cámara, Alexis de Tocqueville "advertía en términos solemnes a los diputados  escépticos: Mirad lo que pasa en el seno de esas clases obreras..., ¿no veis que sus pasiones , de políticas, se han convertido en sociales? ¿No veis que poco a poco se extienden en su seno opiniones, ideas, que no van a derrocar solamente tales leyes, tal ministerio, tal gobierno inclusive, sino la sociedad, a hacerla vacilar sobre las bases en que reposa hoy? ¿No escucháis lo que se dice todos los días en su seno? ¿No oís que allí se repite sin cesar que todo lo que se encuentra por encima de ellas es incapaz e indigno de gobernarlas; que la división de los bienes hecha hasta hoy en el mundo es injusta, que la propiedad reposa sobre unas bases que no son las bases equitativas? "(Tomado del libro "Los Grandes Textos Políticos" de Jean-Jacques Chevallier)

La moraleja es que el hombre se resiste siempre a abandonar sus zonas de confort. En nuestro Perú actual y en el mundo entero la clase política vive inmunizada contra los cambios que la ciencia y la tecnología introducen todos los días en nuestras vidas. Por eso escuchamos día tras día el mismo discurso que venimos oyendo desde hace más de ochenta años. A los políticos se les hace difícil digerir el inmenso salto que la sociedad ha dado en todos los campos, y por lo mismo, en su miopía, creen que el mundo es el mismo en que aprendieron los conceptos que los nutrieron y que para ellos son poco menos que las sagradas escrituras.

Es por eso que no entienden que el pueblo les ha dado por completo la espalda. Es que está más ocupado en sus actividades derivadas de sus agendas surgidas de las redes sociales que en las cojudeces que dicen y hacen sus "representantes" en el campo político, que en realidad no representan a nadie ,más que a si mismos.

Pero no es solamente la clase política activa propiamente dicha, la que hace gala de su ceguera obnubilante, también todo su entorno compuesto por analistas, comentaristas, difusores, encuestadores, etc., están trepados en el mismo tren. ¿Y la sociedad....? ¡Bien, gracias! ....en la calles con las cabezas gachas clavadas con ojos y pensamiento en sus cajitas negras donde sus dedos son las ágiles herramientas que desarrollan su apasionado entretenimiento, mientras que la sonrisa y la risa son los exponentes de la deliciosa vivencia del dueño o dueña.

En este mundo así todo está cambiando y todo está por suceder. El rasero que va a barrer con todo lo conocido hasta hoy ya está a la vuelta de la esquina y los políticos....bien gracias. Ya no representan a nadie, la voz que se extiende imparable en el escenario es la que finalmente gritará estentórea "¡que se vayan todos!"

En este ambiente llega un tal Martín Vizcarra que fue elegido de relancina, porque a alguien había que poner para llenar la papeleta, a asumir una presidencia para la que seguramente no está preparado y con el cual  quizá van a trapear el piso. Es indudable que el hombre casado es recontra estimulado por su mujer cuando se presenta una oportunidad como esta. ¿Qué mujer en el mundo se resiste a la tentación de ostentar el pomposo título de primera dama cuando le cae del cielo? Es un cuentazo aquello de que mi país está primero, este es el comienzo de una muerte anunciada: La sucesión es la que corresponde en ausencia del titular o por un impedimento físico o mental, pero no por imposición grosera en un ataque permanente y artero con acusaciones de delitos que no han sido juzgados.

Y no falta un juez figureti que da orden de impedimento de salida. Pobre Perú que por culpa de tanto ignorante y desadaptado está dando un salto al vacío que más temprano que tarde nos pasará la factura a todos los peruanos, a tirios y troyanos, a inocentes y culpables, a políticos y ciudadanos. Agárrense firmes que nos vamos en picada en esta montaña rusa que no tiene nada que ver con el mundial, en el que dicho sea de paso, ojalá no extrañemos la presencia de nuestro buen PPK trayéndole suerte al equipo, amen .